El 3 de mayo, el Senado instó al Gobierno a “elaborar y propiciar una estrategia de mejora de la competitividad del sector forestal”. Ayer mismo, fue el Congreso el que respaldó una proposición no de ley del Partido Popular que insta al Gobierno a aprovechar los trabajos forestales para crear empleo. En ambos casos, la bioenergía juega un papel importante.
El Congreso planteó ayer al Gobierno el establecimiento de un "marco estable" para el uso de la biomasa forestal dentro del mix de generación de energía con fuentes de origen renovable, al ser "más intensiva" en creación de empleo, tanto directo como indirecto. Según una información de Europa Press, el texto reconoce que con este apoyo se asegura la utilización de la biomasa generada, a la vez que se extrae del monte un combustible susceptible de arder incontroladamente.
El contenido del párrafo anterior está contenido en una proposición no de ley del Partido Popular (PP) en la que se insta al Gobierno a aprovechar la gestión de los bosques españoles, y más concretamente su repoblación, para crear empleo. El Pleno del Congreso respaldó ayer la iniciativa de forma unánime. Se pide, además, que las medidas se tomen a corto plazo y en colaboración con las comunidades autónomas y los propietarios de los montes.
La conexión entre la prevención de incendios forestales y la bioenergía
La bioenergía sería uno de los destinos vinculados a los principales objetivos que se quieren conseguir: mejorar la prevención de incendios, impulsar la gestión forestal sostenible y realizar un máximo aprovechamiento compatible con los recursos forestales y sus industrias derivadas. Europa Press informa que la diputada del PP María Teresa de Lara afirmó que, “dada la crisis económica actual, que roza los cinco millones de parados, es preciso aprovechar las actividades forestales tradicionales y la repoblación de los bosques por su gran capacidad de crear empleo".
El Congreso se suma así al Senado, que a petición de la Confederación Española de Empresarios de la Madera (Confemadera), instó el pasado 3 de junio al Gobierno a elaborar y propiciar una estrategia de mejora de la competitividad del sector forestal y de la madera, que incluye “fomentar el uso energético de la biomasa como energía renovable autóctona, contribuyendo además a la mejora de la limpieza de bosques, y con ello lograr una mejor prevención en materia de incendios”.
El texto del Senado también incluía, entre otras cuestiones, el incentivo y apoyo a los planes de ordenación y aprovechamiento de los montes y sus recursos forestales que fomenten su mejor uso, fomentar la certificación forestal como instrumento que garantice la gestión sostenible, que no haya “vertido cero” de madera al vertedero y la promoción de la compra pública verde para fomentar la utilización de productos de madera.