Una planta piloto en San Martín del Rey Aurelio (Asturias) evalúa la aplicación industrial de la producción integral de biodiesel y biogás a partir de residuos orgánicos de la cadena alimentaria. El proyecto se llama Integral-B y en él participan diversas empresas y centros tecnológicos.
Se trata de la primera instalación piloto en España de estas características. El proyecto ha desarrollado un sistema sostenible para producir biogás, en las plantas de biodiesel, a partir de residuos orgánicos procedentes de sobrantes de comidas de restaurantes, de la industria agroalimentaria y de los subproductos de la propia planta de biodiesel.
A partir de 2011, estos sectores están obligados, por la Directiva Marco de Residuos, a separar los residuos orgánicos que generan para su reutilización. En España se producen más de 500.000 t/año de residuos orgánicos en la restauración y hostelería, y más de 14 millones de t/año de materias sobrantes en la industria agroalimentaria.
La planta piloto consta de 2 módulos que funcionan de forma automática e integrada: un digestor anaerobio de 10 m3 y un motor de cogeneración que producirá electricidad y calor que, a su vez, puede utilizarse bien para el propio proceso o bien para su comercialización. El motor ha sido adaptado para poder utilizar biogás como combustible conjuntamente con glicerina procedente del proceso de fabricación de biodiesel.
Participan en el proyecto el Centro Tecnológico Ainia; la planta de producción de biodiesel de Bionorte, perteneciente al Grupo Isastur; la empresa Biogás Fuel Cell y el Centro Tecnológico CIDAUT.